El desafío de Pablo Milad: más que presidir, tendrá que liderar

Pablo Milad Abusleme, 56 años, licenciado en Educación Física y Ex intendente de la región del Maule desde marzo de 2018 a junio 2020, es el nuevo presidente de la ANFP transformándose en el N° 39 desde su fundación en el año 1938 de la Asociación Central de Futbol (ACF) y desde el año 1986 llamada Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP).      

Que atractivo tiene la presidencia del futbol nacional, que, a pesar de los problemas y sinsabores del cargo, igual lo buscan y lo anhelan. En una oportunidad un amigo, que trabajaba de ministro del Interior por entonces (muchos años atrás), me dijo “Ser presidente del futbol chileno o de ColoColo o de la U, abre más puertas que yo”, y tenía toda la razón. Pero reitero eso fue hace muchos años, en estos tiempos creo no es tan así

Veamos precisamente, en los últimos 50 años, por la ACF ahora ANFP han desfilado 23 presidentes ya sea interinos, designados o interventores, de estos solo dos se repitieron el plato, dígase Abel Alonso S. (empresario del Calzado) y Ricardo Abumohor S (empresario Textil). ¿Porque solo dos quisieron volver…?, ¿Porque nada más que 9, presidentes duraron el periodo para los que fueron elegidos y los más tuvieron que renunciar o resignar el cargo antes de su término…?

Puede haber varias explicaciones, que encierran la dificultad para conducir el futbol, pero creo que una es la fundamental. El futbol profesional en el mundo, dejo hace algún tiempo de ser una actividad solamente movida por la pasión, por los sentimientos y para muchos devocional. Ahora hay que agregarle el factor dinero y esto lo cambio todo, transformando este deporte en una de las actividades más lucrativas y exitosas del planeta. Ojo no lo critico, muy por el contrario, lo celebro y defiendo.

En lo que hago hincapié es que los que dirigen esta industria tienen que estar a la altura de lo que administran, este es el talón de Aquiles en la dirigencia chilena y me atrevería a decir en muchas partes. Un ejemplo al paso, Cuánto tendrá que lidiar el nuevo presidente (como todos los anteriores también) para equilibrar los intereses de los clubes grandes (ColoColo, U de Chile, U católica) con el resto de las 15 instituciones, las actividades de la Selección, con el CDF y agregaría a los representantes de los “manojos” de futbolistas.

Haciendo un repaso rápido podemos ver que entre los que han dirigido los destinos de nuestro balompié, hay médicos, ex futbolistas, periodistas, empresarios textiles, del calzado, del transporte, políticos, abogados, aprendices de abogados, carabineros y ahora un Ex Intendente. Conocí a muchos de ellos y les aseguro que los de mayor éxito, o éxito relativo, ya sea deportivo y/o financiero fueron los de personalidad fuerte con gran liderazgo y experiencia en el trato con las personas. Los pusilánimes y débiles fueron efímeros.

Don Pablo desde esta tribuna le deseamos junto a su directorio el mayor de los éxitos, por lo pronto que pueda cumplir con el periodo por el que fue elegido (no quise referirme a la elección propiamente tal, porque ya está y hoy hablar de ello no conduce a nada), que pueda poner la casa en orden, que vuelva el fútbol con el torneo nacional, no depende de Ud.

Busque un par de técnicos con buen olfato y honestos y envíelos a recorrer Chile en busca de jóvenes talentos con hambre de triunfo. Con la roja de todos, en cuanto se pueda, haga Rodar a Rueda, las eliminatorias para el Mundial de Qatar 2022, de una u otra forma se tendrán que jugar pronto, ya sea con el sistema de siempre o por grupos, hasta puede ser que se jueguen en Europa como se ha insinuado.

Más que presidir, el fútbol chileno necesita un buen líder, que actúe e inspire a través de la visión, el respeto, la pasión, el coraje el compromiso y la coherencia. El líder no predica, actúa desde su dimensión humana, desde la humildad y el diálogo. Presidente Ud tiene la palabra.

Gonzalo Mingo Ortega.