Valeria, la señora de Eduardo Berizzo es tal vez la única persona que sabe exactamente el destino del ahora ex entrenador de O ´Higgins. Y aseguró que va a ser una sorpresa. ¿Universidad de Chile, tal vez?
por Gerardo Ayala Pizarro
Berizzo en andas de sus jugadores celestes. El lunes se reuniría con Carlos Heller
SANTIAGO.- Fiel a lo que ha sido su costumbre, Eduardo Berizzo no quiso revelar cual sería su próximo destino futbolístico. Reconoció que ayer, al terminar la charla técnica, le confirmó a sus jugadores que este sería su último partido en la banca del cuadro rancagüino.
«Me imagino que se alegraron – dijo bromeando.- porque ya deben estar cansados de este tipo que durante dos años se pasó gritándoles: corran, corran, corran»
Después, poniéndose más serio y sentimental, aseguró que: «Estos años vividos en Rancagüa serán inolvidables para mi y para mi familia. Es imposible retribuir tanto cariño recibido. Sentí el aprecio de todas partes, desde el más humilde de los hinchas hasta de la directiva completa, sintetizada en Pablo Hoffmann, que estuvo siempre a mi lado, tratando de resolver cada problema que pudiéramos haber tenido. Con esta gente, O´Higgins está llamado a liderar el fútbol chileno. Se los aseguro, porque esto no se detiene porque se vaya un entrenador. Es una institución demasiado grande que est´s por sobre cualquier nombre propio».
Y con respecto a su futuro – ya está dicho- no quiso anticipar absolutamente nada: «Lo único que puedo decirles es que me voy a mi casa,a descansar. Después, con calma analizaremos lo que viene. No tengo nada decidido»
SU ESPOSA
Quien lo espera en su casa de La Dehesa es Valeria. Obviamente, ella como nadie conoce los pensamientos más íntimos de su marido:
«Estaba muy preocupado antes de este partido. Más que cuando jugó la final con Universidad católica. Porque quería irse dándole una alegría a toda esta gente maravillosa que nos ha abierto sus puertas y sus corazones, entregándonos muestras de cariño imposibles de olvidar. Por suerte se dio como él lo esperaba. Se lo merecían, él y O´Higgins»
– Y ahora señora Valeria, la casa le va a quedar más cerca del estadio de su marido…
«¿Usted lo dice por San Carlos de Apoquindo?…No, no hay nada todavía. Es una decisión muy importante la que tiene que tomar Eduardo y como siempre va a meditar bien, para no equivocarse. Él es así y a mi me alegra mucho que sea así»
Pero, cuál es su pálpito, ¿se quedan en Chile,vuelven a Argentina, se van a México?
«¿Mi pálpito?…Yo estoy feliz de vivir en Chile…ah, y lo único que puedo asegurarles es que Eduardo les va a dar una sorpresa, una gran sorpresa».
Esta última frase encendió las alarmas en San Carlos de Apoquindo, donde daban por seguro la llegada del entrenador rosarino. Y la luz amarilla pasó a ser roja cuando trascendió que Eduardo Berizzo se reuniría el lunes con Carlos Heller.
Dicho en otras palabras, la sorpresa que anticipó la Sra. Valeria pareciera ser de color azul
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