Los australiano aprovecharon una gran contra en el primer tiempo y ese gol de Duke le alcanzó para seguir soñando con la clasificación a octavos de final.

La segunda jornada dentro del Grupo D en la fase de grupos del Mundial de Qatar 2022 nos dejaba un vibrante encuentro entre los combinados nacionales de Túnez y Australia. El choque se disputó en el Estadio Al Janoub,, con capacidad para 40.000 espectadores.

Una selección tunecina que, para la sorpresa de muchos, arrancó un punto en su primera fecha a Dinamarca, aunque bien es cierto que dominaron gran parte del encuentro y merecieron el triunfo.

A su vez, la selección australiana se midió en su primer compromiso en este certamen a la vigente campeona, la selección francesa, con la que cayeron por 4 goles a 1, aunque los primeros en golpear fueron los canguros.

Dominio de Australia ante las arrancadas finales tunecinas

El inicio del duelo tuvo como protagonista la buena presentación de los “Socceroos”, quienes dominaron los primeros minutos.

Sin muchas ocasiones durante el arranque de este primer acto, rondando el ecuador de esta primera mitad llegó la primera acción de peligro. Una gran transición rápida del conjunto oceánico finalizó con un centro al área de Goodwin que fue compaginado con un excelente remate de Duke, que la puso pegada al palo, imposible para Dahmen, el portero tunecino y, de esta manera, Australia pondría el primer tanto en el electrónico.

La primera ocasión con peligro para las Águilas de Cartago llegó en el minuto 41, cuando Jebali cedió el cuero a Dräger, quien chutó a puerta con potencia, aunque Souttar desvió su disparo a saque de esquina.

De nuevo Jebali, esta vez en el tiempo de añadido, cedió el balón hacia el borde del área, en esta ocasión para la llegada de Msakni, quien chutó de inmediato y su balón se marcha rozando el palo izquierdo de la portería defendida por Ryan, el arquero australiano.

Los jugadores de ambos combinados nacionales marchaban a los vestuarios tras un primer tiempo en el que fue protagonista el juego duro e intenso en el que faltaron ocasiones de peligro.

Dominio tunecino sostenido por Ryan

El arranque de la segunda mitad nos dejó claras las intenciones de ambas selecciones: Túnez en búsqueda de un gol para creer en la remontada y Australia buscando el contraataque para cerrar el partido. Sus intenciones nos dejaron una segunda parte de ida y vuelta.

En el 56 y tras un contraataque, Australia tuvo el segundo. Un buen centro raso de Goodwin se paseó por el área del cuadro africano, sin que encontrase un rematador.

Ryan tuvo que aparecer con una gran intervención tras un potente centro-chut de Sassi, recién ingresado al terreno de juego, para salvar a los suyos.

Ya superado el ecuador del segundo acto, los “Socceroos” la volvían a tener al contraataque, tras una gran carrera de Maclaren y un posterior centro, ya dentro del área, que no consigue conectar con Leckie, quien no llega por apenas unos centímetros al balón.

De nuevo tuvo que aparecer Ryan para salvar a los suyos, en esta ocasión tras una buena doble intervención a los disparos de Jebali y Msakni, los cuales salvó sin mucha dificultad.

En el 75’, hubo una ocasión para cada selección. Mooy, desde la lejanía, ejecutó un potente disparo lejano, el cual se marchó por encima del travesaño del arco defendido por Dahmen. Posterior a esta jugada, Msakni, tras un despeje de la zaga australiana, remató de forma acrobática, aunque no logró darle dirección a su disparo y se marchó desviado.

Khazri tuvo el gol del empate en el minuto 90 tras un chut desde el interior del área precedido por un centro de Sassi, aunque Ryan, que se convirtió en el mejor de esta segunda mitad, salvó una vez más a los canguros.

La victoria, la tercera en seis participaciones en Copas del Mundo, puso fin a la racha de Australia de siete partidos sin ganar en los Mundiales. La última vez que había sumado de a tres fue con una victoria sobre Serbia en 2010.

/Vavel. Fotos: twitter oficial copa del mundo, australia y tunez