Este grupo de jugadores sigue haciendo historia. Por primera vez nuestra selección clasifica a dos mundiales consecutivos teniendo que enfrentar una eliminatoria. Y lo hizo con clase, venciendo a Ecuador por 2 a 1 con gran actuación de Sánchez.
Andrea Betancourt Scannpieco
abetancourt@todofutbol.cl
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Chile le ganó a Ecuador y timbró los pasajes al Mundial de Brasil 2014.
Con esos antecedentes se podía prever que la tarea nos ería un paseo ni mucho menos. Y así tal fue al menos en los primeros 30 minutos, donde Chile no logró dominar el compromiso ni tampoco provocar mucho daño en el área rival. En cambio, una vez más, Claudio Bravo tuvo trabajo pesado y como es su sello siempre resolvió con gran categoría para salvar por lo menos en dos ocasiones claras el gol ecuatoriano, con sendas tapadas muy vistosas que le fueron dando mayor confianza a a zaga chilena.
Chile tenía la pelota en su poder, pero no era capaz de llegar con profundidad, principalmente porque Ecuador se replegaba muy bien a la hora de defender y no le daba ninguna chance a la escuadra nacional de jugar con tiempo y limpieza el balón.
Pero vinieron los goles que terminaron siendo clave. El primero llegó tras un excelente carrerón por la izquierda de Mena que sacó un buen centro al primer palo para que por ahí apareciera Alexis Sánchez para elevarse al más puro estilo de Iván Zamorano, le ganó la marca a su carcelero y de cabeza la metió en un ángulo para comenzar el festejo eterno.
De ahí, casi de inmediato, Chile aprovechó de golpear fuerte y anotó el segundo. Un córner desde la izquierda y en el primer palo nuevamente apareció Alexis, esta vez para peinar para que por el segundo palo apareciera totalmente libre Gary Medel para anotar el 2 a 0 con el arco a su merced. Con eso, el descanso vino bien, con un equipo lleno de sonrisas.
A TIMBRAR LOS PASAJES
En la segunda etapa, Chile no se desgastó. Sabía que la clasificación ya era un hecho, pero tampoco quería pasar otra vez por una situación como la vivida la semana pasada en Barranquilla. Por eso, Chile sin apurar, salió a abrochar el triunfo buscando un tercer gol. Y lo tuvo por ahí con un cabezazo de Vidal que caprichosamente dio en el poste derecho del pórtico visitante y la bola luego le cayó de rebote al portero ecuatoriano.
Sin embargo, el partido ganó en algo de emoción, cuando Ecuador logró un descuento que apretó el marcador. El tanto fue un gran contragolpe encabezado por Valencia, que por algo fue elegido el jugador más veloz del planeta. EL hombre del Manchester encaró desde mediocampo aprovechando que la defensa chilena quedó mal parada y nadie lo pudo parar, lo que le permitió alargar para que Felipe Caicedo definiera con un remate cruzado.
De ahí en adelante, con ese resultado, Ecuador también se sintió clasificado y eso trajo consigo que el partido se cerró por ambos lados, lo que se reflejó en mucho juego de mediocampo intrascendente por ambos lados y pocas acciones en las porterías. La idea era quemar los minutos y esperar el pitazo final para ponerse a celebrar.
Y tal cual, se acabó el partido y se vio algo pocas veces visto en una cancha de fútbol. Ambas escuadras se abrazaban y saltaban desaforados, lágrimas en los jugadores y gritos de alegría. Y no era para menos porque Chile por fin podía asegurar su clasificación al Mundial de Brasil y el perdedor, Ecuador, también lograba su clasificación merecida.
Ahora se nos viene un Mundial que nos espera con los brazos abiertos y este selección nos alimenta la ilusión de tener una participación importante en la cita global. Tenemos una generación dorada, que llega con mayor madurez y que se luce en las canchas más importantes del mundo. ¡Viva Chile!.
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