
Una noche negra, colectiva e individualmente de los albos. Ninguno – salvo el delantero argentino- jugó para nota 5 yalgunos reprobaron derechamente, partiendo por el arquero Fernando De Paul
Fernando de Paul: Su partido más flojo desde que está en Colo Colo y tal vez en Chile. Se comió absolutamente el primer gol y estuvo muy pero muy flojo en el segundo y el tercero
Alan Saldivia: En línea de tres fue destinado a marcar a la derecha e hizo agua absolutamente, ya que nunca pudo parar a Clemente Montes. Lo sacaron en el entretiempo
Emiliano Amor: También un partido muy flojo. Perdió de alto en todas las pelotas que cayeron a su área y demostró excesiva lentitud cuando corrió mano a mano con Clemente Montes en el cuarto gol
Sebastián Vegas: El menos malo de la línea de fondo, pero no le da para más que eso. Porque también demostró inseguridad y perdió en casi todos los duelos individuales
Mauricio Isla: Intrascendente cuando comenzó jugando como salida por la derecha y flojito marcando cuando bajó a integrar una línea de cuatro
Víctor Felipe Méndez: Tuvo algunas jugadas en que mostró intención , pero poco a poco se fue diluyendo y terminó siendo sustituido
Vicente Pizarro: Tampoco pudo encontrar nunca el partido, corrió mucho pero siempre detrás de la pelota
Arturo Vidal: Nadie manifestó un mínimo reclamo porque lo sacaron (y eso que lo sustituyó Esteban Pavez). Eso demuestra que el King pasó sin pena ni gloria por este clásico 188
Erick Wiemberg: Tuvo el mérito de anotar un golazo que trajo algo de esperanza al concluir el primer tiempo. Con eso ya fue figura destacada en este Colo Colo tan flojo
Lucas Cepeda: Si este fue su último partido en Colo Colo, la despedida fue la más triste de todas. Luchó, buscó, pero no pudo aportar mucho en ataque
Javier Correa: El único rescatable de verdad en los albos. Por momentos era Javier Correa contra Universidad Católica. Pudo y mereicó hacer un gol. Y para redondear una tarde para el olvido salió seriamente lesionado de la cancha
Claudio Aquino, Esteban Pavez, Francisco Marchant y Salomón Rodríguez: Ingresaron en el segundo tiempo y aportaron muy poco. El capitán pudo anotar el segundo descuento cerca del final, pero lo evitó Ampuero en la raya
Jorge Almirón: Como en la novela de Osvaldo Soriano: Triste, solitario y final
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