El Barça se impuso al Elche en la 55 edición del trofeu Joan Gamper, el más desangelado de la historia por la ausencia de público y porque el partido tampoco dio mucho más de sí. Muy superior el conjunto azulgrana ante un rival recién ascendido y que todavía debe variar mucho la plantilla. Un partido para quedarse con los detalles, como un dominio absoluto, la rapidez en la circulación de los primeros minutos y la portería a cero. Por lo demás, un once que promete ser muy reconocible, el debut de Pjanic, los buenos minutos de Ansu y el deseo de que empiece LaLiga el próxino domingo.
Ronald Koeman mostró en el Gamper unas cartas que, a la espera de definir el papel de Miralem Pjanic, se antojan definitivas para el arranque liguero del próximo sábado. La defensa con Sergi Roberto, Piqué, Lenglet y Jordi Alba es inamovible y el doble pivote, si el bosnio no lo impide, pertenece a De Jong y Busquets. Arriba, el holandés, aferrado a su 4-2.-3-1, apostó de entrada por Griezmann y el reaparecido Ansu por bandas, Coutinho en la mediapunta y Leo de falso ‘9’.
El partido se pone rápido de cara
Las pruebas siempre tienen más credibilidad si salen bien desde el principio. Y el Barça a los dos minutos ya iba por delante en el marcador. El papel de los laterales será uno de los aspectos clave esta temporada y Jordi Alba lo interpretó a la perfección. Leo vio subir a su compañero de sociedad y envió un brutal pase en profundidad para que Alba le sirviera en bandeja la asistencia a Griezmann. El francés sí tuvo esta vez olfato de gol.
El Barça dominó por completo a un Elche en construcción y con déficit de efectivos a siete días para estrenarse en LaLiga. Movió y movió bien el balón el equipo azulgrana, con rápida circulación pese a que los ilicitanos llegaron a plantar una última con seis futbolistas. Griezmann chutó con rosca y se fue alto, pero la intención estuvo ahí, y De Jong se plantó solo ante Edgar Badia pero no consiguió batirlo. Tampoco Messi en el lanzamiento de una falta muy colocada por raso.
Detalles que cuentan
Todo esto antes de llegar al ecuador del primer tiempo. Nada mal, aunque el ritmo decayó en picado hasta el descanso. Pero son partidos para quedarse con los detalles y hay que prometen. Como ver a un motivadísimo Coutinho bajar con ganas y recuperar dos balones peligrosos, o la presión para rodear a un futbolista rival y dejarle sin escapatoria. No todo está engrasado a la perfección, es cierto, y da la sensación de que el equipo puede romperse si sufre un rápido ataque. Falta un mayor equilibrio defensivo, sobre todo cuando los contrarios sean más exigentes.
Pero calidad hay de sobras, y arriba el sistema permite mucha movilidad. Messi repitió en el falso ‘9’ con libertad para alternar la posición y bajar a recibir. Griezmann y Ansu partieron por bandas, pero se centraron cuando subieron los laterales, lo que permitió acumular jugadores en la zona del gol.
Ansu, protagonista
Más apagado en la primera mitad, Ansu Fati fue el nombre propio de los inicios de la segunda mitad. Empezó con un buen cabezazo a centro de Sergi Roberto que rozó el palo. Desbordó por la izquierda y dio un gran pase a Messi, que se quedó en el mano a mano ante Edgar Badia. A la tercera, chutó cruzado. Y ya no hubo más porque le sustituyó Dembélé.
Además del francés, también entraron para la última media hora el debutante Pjanic y Trincao. Messi buscó el gol y volvió a poner a prueba a Edgar Badía, esta vez con un chut lejano rechazado por el mete catalán. De lo mejor que echarse a la boca en esta segunda mitad la combinación entre Coutinho y Trincao, pero el portugués se estrelló ante un espectacular Edgar Badia, que volvió a atajar poco después ante el seco disparo de Dembélé.
Perdonan demasiado… y Neto debe aparecer
El Elche solo llegó una vez, pero fue muy clara, del recién entrado Bri, y obligó al lucimiento de Neto. Una acción que nos dejó que el brasileño está enchufado, pero también el desajuste defensivo, el único importante del choque, pero que pudo traer consecuencias.
No fue a más la cosa y el Barça conquistó el Gamper. Creó el equipo azulgrana 21 ocasiones, de ellas, 11 disparos a puerta., Pero marcó solo un gol. El Barça ya está a punto para LaLiga, pero tocará afinar la puntería.
Escrito por Germán Bona para Sport de Barcelona
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