Al minuto 18, cuando el fútbol no aparecía por ningún largo, el juvenil delantero argentino Pablo Solari inventó la jugada imposible y marcó el gol que mantiene a Colo Colo en primera división y manda al descenso a la Universidad de Concepción
Ya está. Se acabó la tristemente célebre y tortuosa experiencia de Colo Colo, agobiado hasta esta tarde por el Fantasma de la B.
Hasta que Julio Bascuñán dio por iniciado el partido en Talca, la posibilidad de bajar a la segunda categoría del fútbol chileno, por primera vez en su historia era una pesadilla que amenazaba con hacerse realidad en esta tarde talquina.
Con el pitazo final del propio Bascuñán llegó el alivio para una hinchada que aprendió a sufrir con el fantasma del descenso incluido este partido, que por fin terminó, después de pasajes de angustia y zozobra, pero que finalmente se logró mantener la permanencia. Que es casi lo mismo que seguir con vida.
El escenario reducido, sin la presencia de hinchas por la pandemia, no opacó el delirio, el grito de desahogo que desplegó el hincha albo tras el final del encuentro.
En la cancha, los jugadores descomprimieron la crítica situación que pasaron, tras un torneo que se complicó, con llantos y abrazos, mientras que el festejo siguió luego en la intimidad y en el regreso a Santiago.
Colo Colo es de primera, Colo Colo está vivo
EL PARTIDO
Con una mala noticia para Hugo Balladares, Universidad de Concepción entró a la cancha: Leonardo Povea se resintió y debió dejar su lugar a Andrés Robles.
Más allá de ese inconveniente, la verdad es que el conjunto penquista nunca estuvo a la altura de lo que se jugaba en cancha
Y en cuanto a Colo Colo, pareciera que entró a jugar sus cartas desde el minuto 1: en la primera jugada del partido, Jara exigió con un potente remate a Reyes
Pero, como lo que se juega es muy importante, por lo mismo, el fútbol no aparece por ningún lado. Roces, golpes, infracciones, todo trabado.
GOLAZO, TREMENDO GOLAZO DE SOLARI
Hasta que apareció el diferente. Gran pero gran jugada de Solari, que entró por derecha, gambeteó a uno, eludió a otro y derrotó a Reyes con un remate que le paso bajo el cuerpo al arquero penquista.
Todo el planeta fútbol siguió la trayectoria de esa pelota que se coló bajo el cuerpo del arquero. Hubo gritos y lamentos. Insultos y adoraciones. Tembló la tierra, sucumbió la historia. El goleador y el infinito. La eternidad. Solari mira hacia la tribuna donde hay un puñado de jugadores y dirigentes de Colo Colo y se cuadra como soldado que ha cumplido con la misión que le encomendaron.
Fui yo, fui yo, fui yo, parece decirle a la historia.
Nada menos que su primer gol en el profesionalismo.
Y que gol Dios mío
FUE UN OÁSIS
De ahí, otra vez a lo mismo: faltas, tarjetas, interrupción del juego.
El fútbol sigue sin aparecer en Talca, pero a los colocolinos les da lo mismo. Lo están ganado en la única jugada rescatable del primer tiempo y lo demás…a la FIFA.
SEGUNDO TIEMPO
Ambos entrenadores decidieron no hacer cambios para afrontar el segundo tiempo.
Pero, repitiéndose una constante que se ha dado con este Colo Colo cuando se pone en ventaja. Tempranamente se tira atrás y le cede la iniciativa al rival.
Con el agravante esta vez que se cometieron muchas faltas en las inmediaciones del área. Desafortunadamente para Universidad de Concepción, sorprendió la precaria ejecución de dos que le pegan bien a la pelota, Carvallo y Carreño.
Por lo mismo, esos centros a la olla fueron un caramelo para los centrales albos y para Cortés
COLO COLO,A DEFENDER EL 1-0
Es cierto, si a cualquier hincha albo le pedían que firmara el 1-0, lo hacía de inmediato.
Pero, el entrenador tiene que ver el partido con otro prisma. Y Quinteros actuó como hincha: firmó tempranamente el 1-0. La mejor prueba es que cuando debió salir Jara, no lo reemplazó por Matías Fernández. El que entró fue Williams Alarcón, para poner más marca y cada vez menos fútbol en medio campo.
Y empezó a trabajar Cortés, porque la U de Conce se encontró con la cancha a su disposición y se fue arriba.
Waterman tuvo el empate y el arquero estuvo brillante al evitar el empate con los pies.
SOLARI OTRA VEZ
La única opción para Colo Colo, llegar de contra.
Y la única vía: el argentino Solari, que en otra gran jugada estrelló la pelota en el travesaño.
Hasta que se acalambró y con él se fue el fútbol.
SE ACABÓ, PERO EMPIEZA OTRA HISTORIA
Colo Colo ganó, vive y es lógico que hoy celebren sus jugadores sus dirigentes y sus hinchas.
Pero ya, desde mañana hay que reflexionar en todo lo que se hizo mal para que esta pesadilla no vuelva a repetirse.
Porque Colo Colo debe entender que es como el drogadicto que pudo abrir los ojos después de una sobredosis. O el borracho empedernido que encontró de última un donante para su hígado destrozado.
Por lo mismo, a contar de ahora, cuando veas la luz de la mañana recuerda que estás vivo…pero no más drogas, no más alcohol.
Se acabaron los chocolates si eres diabético, Colo Colo, y no más carnes rojas si está alto tu colesterol.
Todo lo hiciste mal en este campeonato, Colo Colo. Todo, no se salva nada ni nadie. Partiendo por Mosa y su directiva, siguiendo por Mario Salas y los otros técnicos que pasaron por la banca y concluyendo en la cancha con el nulo aporte que fueron algunos jugadores de los que se esperaba mucho, como Nicolás Blandi y Jorge Valdivia, por poner dos ejemplos entre muchos.
Nada de eso puede repetirse Colo Colo, nada.
Porque no hay corazón que aguante otra tarde como esta de Talca
/por Gerardo Ayala Pizarro. Fotos: Twitter Colo Colo y Universidad de Concepcion
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